Si usted se quiere mudar de vivienda y está pensando en que es mejor, si vender su casa o simplemente ponerla en arriendo, esta información es para usted.
Qué es mejor, ¿vender o arrendar?
Actualmente el mercado inmobiliario presenta cierta incertidumbre que no permite determinar con claridad qué opción es más viable y va a garantizar un buen ingreso. Sin embargo Finanzas Personales quiso averiguar cuál es su mejor opción en distintas ciudades del país y para ello consultó a Cesar Augusto Llano, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz (FEDELONJAS). Estas son las conclusiones.
Lo primero que usted debe saber, y la primera aclaración de Llano es que no existe una opción única para el país. Esto se determina al momento de saber la ciudad en cuestión y además el estrato y ubicación de la vivienda. Estos aspectos que cambian según el lugar son claves al momento de analizar si cierto inmueble es mejor venderlo o directamente ponerlo en arriendo.
Bogotá
Para la capital del país, existen varias opciones. Principalmente por la magnitud de Bogotá y la amplia oferta inmobiliaria que existe en el mercado. Si usted es de un estrato alto, actualmente le conviene arrendar. La simple razón: el precio que hoy tiene el metro cuadrado y las oportunidades de cobrar una buena mensualidad si la vivienda cumple las características. Tomando el año 2005 como el año cero, hasta hoy en día, el valor de una propiedad de este estrato se ha incrementado en más del 120% y actualmente el arriendo se calcula en un 4% del valor total del inmueble.
Para estratos bajo y medio el panorama es distinto. Actualmente el mercado indica que si usted pertenece a estos estratos, debe vender. Los compradores están observando esta compra como una oportunidad e inversión a largo plazo. La rentabilidad es segura, principalmente porque esa propiedad no se va a desvalorizar en los próximos 15 años. Vender es una apuesta segura.
Cali
En la capital vallecaucana lo mejor es vender. En Cali se están presentando las condiciones ideales para tomar provecho del crecimiento inmobiliario y vender su propiedad a un excelente precio. Con respecto a esa medida del 2005, esta ciudad tiene la oportunidad de valorizar el precio promedio de una vivienda.
Medellín, Barranquilla y Bucaramanga
Estas ciudades tienen en común una curva ascendente en términos de venta, sin embargo están cerca de llegar a su límite. Por eso, si usted tiene su propiedad en alguna de estas ciudades y la quiere vender, hágalo rápido. Aun es rentable pero no es claro hasta cuándo será así. Al momento de que esto ocurra, lo mejor será arrendar. Llano asegura que en un par de años esa curva va a cambiar.
¿Qué pasa con el dilema inquilino-arrendatario?
Es uno de los grandes inconvenientes que existe en el país. Si usted vive en arriendo quizás ya pasó por este dilema. En muchas ocasiones, sobre todo en estratos bajos, el contrato no queda claro y no existe un tercero que lo regule. Para Llano este es uno de los temas más dedicados al momento de determinar si vende o arrienda su vivienda. Sin embargo, tiene claro que no se le puede exigir a todos los colombianos tener una póliza que asegure el inmueble al momento de hacer el contrato.
Las cifras hablan por sí solas: alrededor de cuatro millones de viviendas del país son de arrendamiento, y de esas, sólo 250.000 cuentan con un contrato de cobertura cobijado por una aseguradora. Lo ideal sería esto, revisar el contrato y que éste se firme con la existencia de un tercero. Sin embargo, está claro que las aseguradoras no depositan su mirada y su confianza en personas de escasos recursos y es ahí en dónde ocurre la principal problemática de contratos ilegales y estafas inmobiliarias.
Fedelonjas tiene claro que es supremamente complicado un proyecto de ley como el que plantea el senador Roy Barreras el cual pretende introducir una póliza de seguro obligatoria que garantice el cumplimiento de las obligaciones por parte del arrendatario. Lo que sí se debe hacer es fomentar la implementación de contratos formales y crear espacios en dónde personas de estratos bajos tengan claras estas condiciones y se motiven a pedir un tercero como parte del trato.